Liderazgo en Diseño Sostenible: Redituando la Naturaleza en Paisajes Urbanos

Liderazgo en Diseño Sostenible: Redituando la Naturaleza en Paisajes Urbanos

El diseño sostenible de paisajes urbanos es una tendencia ecológica y económica que transforma las ciudades al crear espacios verdes que mejoran la calidad de vida y el medio ambiente. Este liderazgo en diseño sostenible consiste en integrar la naturaleza en el entorno urbano, aprovechando los recursos naturales y minimizando el impacto ambiental. Es en sí misma el arte de crear y transformar los espacios públicos de las ciudades, pueblos y aldeas, para mejorar la calidad de vida de sus habitantes y visitantes. Implica el uso de elementos naturales y artificiales, como plantas, agua, mobiliario, iluminación, señalización y arte, para crear ambientes atractivos, funcionales y sostenibles.
El ecourbanismo se relaciona con varias disciplinas, como la ecología, la arquitectura, la planificación y la gestión urbana. La ecología aporta los principios para conservar y restaurar los ecosistemas urbanos, así como para mitigar los impactos ambientales negativos, como la contaminación, el ruido y el cambio climático. La arquitectura contribuye con el diseño de edificios y estructuras que se integran con el paisaje y respetan el contexto histórico y cultural. La planificación establece los objetivos, las estrategias y las normas para orientar el desarrollo urbano de forma ordenada y participativa. La gestión urbana se encarga de implementar, supervisar y evaluar los proyectos de paisaje, así como de garantizar su mantenimiento y conservación

Oportunidades para América con del diseño sostenible de paisajes urbanos.

El diseño del paisaje del entorno urbano en Latinoamérica es importante porque puede contribuir a mejorar la calidad de vida, la sostenibilidad y la resiliencia de las ciudades que enfrentan diversos desafíos como el cambio climático, la pobreza, la desigualdad, la contaminación y la violencia. El liderazgo en el diseño sostenible del paisaje urbano no es solo una cuestión estética, sino también una forma de intervenir en el territorio con una visión integral, participativa y adaptativa, utilizando la innovación en ecourbanismo.

Ejemplos de proyectos urbanos con soluciones basadas en la naturaleza

Algunos ejemplos de proyectos urbanos que han incorporado el diseño del paisaje como una estrategia de regeneración, adaptación y mitigación son:

  • El Parque Bicentenario en Santiago de Chile, que transformó un antiguo aeropuerto en un espacio público verde que ofrece servicios ecosistémicos, recreación y educación ambiental.
  • El Parque Lineal La Presidenta en Medellín, Colombia, que recuperó una quebrada degradada y la convirtió en un corredor ecológico y social que conecta diferentes barrios y fomenta la integración comunitaria.
  • El Parque Ecológico Lago de Texcoco en Ciudad de México, que busca restaurar el antiguo lago que fue desecado y urbanizado, creando un gran pulmón verde que regula el clima, almacena agua y genera biodiversidad.

Estos proyectos son solo algunos ejemplos de cómo el diseño del paisaje puede ser una herramienta poderosa para mejorar las ciudades latinoamericanas desde una perspectiva ambiental, social y económica. 

La infraestructura verde y las soluciones basadas en la naturaleza son formas de aprovechar los servicios ecosistémicos que brinda la naturaleza para mejorar la calidad de vida y la resiliencia de las ciudades. Estas soluciones consisten en utilizar la vegetación, los ecosistemas y otros elementos naturales para generar beneficios ecológicos, económicos y sociales, tanto a nivel local como global.

Soluciones naturales para infraestructura.

La infraestructura verde y las soluciones basadas en la naturaleza pueden contribuir a resolver diversos problemas urbanos, tales como:

  • La mejora de la calidad del aire y del agua: La vegetación puede capturar partículas contaminantes, reducir la temperatura y la demanda de energía, filtrar y almacenar el agua de lluvia, recargar los acuíferos y depurar las aguas residuales.
  • La reducción del riesgo de inundaciones: Los espacios verdes pueden actuar como esponjas naturales, reteniendo el exceso de agua y evitando su escorrentía hacia zonas vulnerables. Además, pueden prevenir la erosión del suelo y proteger las costas de las olas y las mareas.
  • La mitigación del cambio climático: La vegetación puede secuestrar carbono, reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y aumentar la capacidad de adaptación a los impactos climáticos]. Por ejemplo, los árboles pueden proporcionar sombra, refrescar el ambiente y reducir el estrés térmico.
  • El aumento de la biodiversidad: Los espacios verdes pueden albergar una gran variedad de especies animales y vegetales, creando hábitats y corredores ecológicos que favorecen la conectividad y la conservación de la naturaleza.
  • La mejora de la salud y el bienestar de las personas: Los espacios verdes pueden ofrecer oportunidades para el ocio, el deporte, el aprendizaje y el contacto con la naturaleza, mejorando la salud física y mental, el desarrollo cognitivo y la cohesión social.
    La infraestructura verde y las soluciones basadas en la naturaleza pueden adoptar diversas formas y escalas, desde parques urbanos hasta techos verdes, desde jardines verticales hasta humedales artificiales. Lo importante es que se integren en la planificación urbana y se complementen con la infraestructura gris convencional, creando sistemas híbridos que maximicen los beneficios para las ciudades y sus habitantes.

Como mejorar la economía de la naturaleza y obtener beneficios económicos con el diseño de paisaje urbano y soluciones basadas en la naturaleza

Diseño sostenible de paisajes urbanos. Monte Urbano

La infraestructura verde y las soluciones basadas en la naturaleza son una herramienta de eficacia probada que nos ayuda a comprender el valor de los beneficios que la naturaleza proporciona a la sociedad humana y a movilizar inversiones para sostenerlos y reforzarlos. Es así como la economía de la naturaleza es un enfoque que reconoce el valor de los servicios ecosistémicos que brinda la naturaleza para el bienestar humano y el desarrollo sostenible. Estos servicios incluyen la provisión de alimentos, agua, energía, materias primas, regulación del clima, protección contra desastres naturales, polinización, recreación, entre otros. Sin embargo, estos servicios no suelen estar reflejados en los precios de mercado ni en las cuentas nacionales, lo que conduce a una sobreexplotación y degradación de los recursos naturales.

Para revertir esta situación, se requiere integrar el valor de la naturaleza en el sistema económico, desde las políticas gubernamentales hasta las decisiones empresariales y financieras. Esto implica medir y valorar los servicios ecosistémicos, incorporarlos en la planificación y gestión del territorio, asignarles un precio justo y crear incentivos para su conservación y restauración.

Instrumentos financieros verdes

Los productos financieros sostenibles son instrumentos que buscan generar beneficios ambientales, sociales y económicos, al tiempo que ofrecen un rendimiento financiero competitivo. Estos productos se basan en criterios ambientales, sociales y de gobernabilidad (ASG) para seleccionar los proyectos o actividades que se financian o invierten.

Algunos ejemplos de productos financieros sostenibles son:

– Los bonos verdes: Son títulos de deuda emitidos por entidades públicas o privadas para financiar proyectos que contribuyen a la mitigación o adaptación al cambio climático, como las energías renovables, la eficiencia energética, el transporte sostenible, la gestión de residuos o el agua.

– Los fondos de conservación: Son mecanismos financieros que movilizan recursos para apoyar la conservación y el uso sostenible de la biodiversidad y los ecosistemas. Estos fondos pueden tener diferentes formas jurídicas y operativas, como fundaciones, fideicomisos o asociaciones.

– Los pagos por servicios ambientales: Son acuerdos voluntarios entre proveedores y usuarios de servicios ecosistémicos, en los que los primeros reciben una compensación económica o en especie por adoptar prácticas que mantienen o mejoran dichos servicios. Por ejemplo, los agricultores pueden recibir pagos por conservar los bosques que protegen las cuencas hidrográficas.

Finalmente, el liderazgo en diseño sostenible de paisajes urbanos incorporando soluciones basadas en la naturaleza es una estrategia que busca mejorar la calidad de vida y la resiliencia de las ciudades y sus habitantes; al mismo tiempo que contribuye a la conservación y restauración de los recursos naturales. Esta estrategia se puede aplicar en diferentes escalas, desde el nivel de la vivienda hasta el nivel de la región, y en diferentes contextos, desde el rural hasta el urbano.

Así, se pueden generar propuestas de convivencia comunitaria que fomenten la participación, la inclusión, la equidad y la solidaridad. Además, se pueden desarrollar soluciones económicas que disminuyan la brecha de la pobreza e incrementen los índices de producto interno bruto, de tal manera que también sean sostenibles con la armonía ambiental, disminuyendo nuestra huella ecológica y revirtiendo o mitigando las consecuencias negativas que ha tenido el cambio climático.

El diseño del paisaje del entorno urbano con soluciones basadas en la naturaleza es, por tanto, una oportunidad para crear ciudades más verdes, más humanas y más prósperas.

LIDERZGO E INNOVACIÓN EN ECOURBANISMO